Mar22
¿La cerveza caduca? ¡Respondemos a la eterna pregunta!
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Es una de las primeras grandes preguntas que se hace todo cervecero: ¿La cerveza caduca? De hecho, es muy habitual encontrarse a personas que han consumido esta bebida por muchos años y que todavía no tienen claro este punto. Para todos ellos va dirigido este nuevo post de nuestro blog. ¡Esperamos que os sea de utilidad!
Lo cierto es que hay mucho debate alrededor de ella. No es solo su caducidad, también hay mucha gente que discute sobre la importancia de la espuma en la cerveza. Si quieres aclarar conceptos, te recomendamos que te pases por este artículo que publicamos en este mismo espacio hace no demasiados días. Seguro que te resulta muy útil.
Ahora bien, sobre si la cerveza caduca o no, podemos afirmar que se trata de un tema muy controvertido y que genera un choque de opiniones enfrentadas. Si nos atenemos a la definición exacta de caducidad (fecha límite a partir de la cual un alimento es nocivo para nuestro organismo), entonces podemos afirmar que esta bebida no caduca.
Pero, ¿qué ocurre? Que en todas las latas o botellas que encontramos en supermercados podemos observar con facilidad una fecha de consumo preferente. ¿Entonces? No te preocupes. Te lo vamos a explicar.
¿La cerveza caduca? ¡No!
Como hemos dicho, lo que nos encontramos en latas y botellas es una fecha de duración mínima o de consumo aconsejado. Esto no es lo mismo que la caducidad. Así que si te sigues preguntando si la cerveza caduca, la respuesta que te damos aquí y ahora es rotundamente no. De hecho, la diferencia entre consumo preferente y fecha de caducidad está legislada por ley y están muy lejos de significar lo mismo.
Como hemos mencionado anteriormente, la fecha de caducidad tiene que ver con el momento en el que una bebida o un alimento se deteriora. Por lo tanto, se asocia a lo que conocemos como alimentos perecederos y que estarán prohibidos colocar o conservar en el mercado más allá de esa fecha.
En cambio, la fecha de duración mínima es aquella en la que el producto va a conservar todas sus propiedades intactas, de manera que el productor garantice que la calidad siempre será la misma.